El arte y su potencial para mediar lo conflictivo
PATRIMONIOS INCÓMODOS
Sara Lucía Gómez Machado
1/17/20254 min read


Autora: Sara Lucía Gómez Machado - Historiadora, investigadora y docente
En el camino de la investigación y en mi camino personal como visitante frecuente de museos y demás lugares de interés cultural alrededor del mundo, he podido encontrar algunos elementos que han sido de ayuda para abordar, desde la educación y la mediación, temas relacionados con momentos difíciles de la historia.
El pasado puede ser incómodo
La historia está llena de momentos oscuros que han estado marcados por eventos de violencia o represión, y que son difíciles de recordar y de narrar en el presente. Ejemplo de estos momentos son: las guerras, las dictaduras, la esclavitud y el conflicto armado entre muchos otros.
El término “patrimonio incómodo” es el que, en mi trabajo investigativo, he trabajado a lo largo de los años, sin embargo existen muchos otros términos que se utilizan en diferentes partes del mundo y en diferentes contextos para referirse a estos tipos de legados; patrimonios conflictivos, negativos, difíciles o disonantes son solo algunos de ellos.
¿Qué hace que un patrimonio sea incómodo?
Para entender qué es lo que hace que estos tipos de patrimonio sean incómodos debemos hablar de por lo menos tres elementos:
En primer lugar, es importante tener en cuenta que estos tipos de patrimonio pueden ser interpretados por algunas personas como evocaciones de los eventos trágicos o violentos, que enaltecen hechos donde han sido vulnerados los derechos humanos.
En segundo lugar, vale la pena mencionar que la principal dificultad al enfrentarse a este tipo de elementos, es su cercanía, no solo en el tiempo, sino sobre todo en la experiencia. No importa que tan lejano sea un evento, aun existen muchas personas que reconocerán y cargarán con el legado ocasionado por estos hechos, un ejemplo perfecto es el de la esclavitud y la esclavización.
Finalmente, podemos entender que a pesar de ser representativos hoy en día, estos pasados oscuros o incómodos presentan una dificultad muy grande para reconciliarse públicamente con una identidad positiva, sin mencionar el juicio que algunas personas sienten que se les va a hacer desde el presente por sus acciones en el pasado.
Para avanzar prohibido olvidar
Aunque muchas personas tienen la idea de que es necesario olvidar el pasado y barrerlo debajo de la alfombra para seguir adelante, en los últimos años se ha demostrado que esto no es del todo efectivo. Los patrimonios incómodos, hoy más que nunca, deben ser conservados, estudiados y exhibidos al público, a pesar de la negatividad que los acompaña, pues es la única forma en la que la ciudadanía podrá reflexionar y debatir sobre dichos pasados oscuros, para aprender de ellos y evitar que eventos similares sucedan en el futuro.
En este contexto, los mediadores culturales así como también los espacios donde estos patrimonios se ubican, tenemos una responsabilidad muy grande al elegir las formas adecuadas para presentar estos elementos al público, con el fin de crear un espacio para la reflexión y no caer en el error de banalizar o, peor aún, enaltecer los hechos atroces a los que se hace referencia.
El lenguaje artístico y su potencial para mediar la oscuridad
Hasta aquí es claro que la línea que separa la presentación oportuna o inoportuna de un patrimonio incómodo es muy delgada, sobre todo cuando el objetivo es mostrar estos elementos de forma significativa. Sin embargo, a lo largo de los años se han hecho varias reflexiones en torno al tema. En mi labor como mediadora cultural e investigadora en este campo, he podido ver la efectividad que el lenguaje artístico tiene para resignificar estos legados y activar la reflexión social y política de estos elementos.
A Continuación, presento algunos ejemplos que a lo largo de mi trayectoria profesional y personal he podido conocer y que por una u otra razón han sido objeto de mi interés. De todos ellos se puede encontrar información en la web, bien sea en las páginas de los museos, o con ayuda de la street view de google maps para el caso de los monumentos y obras de arte ubicadas en el espacio público. Los invitamos a que exploren estos y muchos otros lugares de la historia incómoda de la humanidad y conozcan su historia.
Berlín
El monumento a los judíos de Europa asesinados fue diseñado por el arquitecto Peter Eisenman y por el ingeniero Buro Happold par recordar a los judíos víctimas del holocausto. El monumento consta de un terreno inclinado de 19 metros cuadrados en el que se encuentran emplazadas de forma vertical 2711 losas de hormigón que están diseñadas para producir un ambiente confuso e incómodo que permita reflexionar sobre este evento.
Por otro lado, la East Side Gallery también ubicada en Berlín, es una galería a cielo abierto que se sitúa sobre una sección del muro de Berlín, en este lugar pueden encontrarse varios murales hechos por artistas de todo el mundo que rinden homenaje a la libertad y la esperanza de un mundo mejor.
Medellín
El Museo Casa de la Memoria en Medellín Colombia, es un espacio que busca construir y narrar las memorias del conflicto armado en el territorio de Antioquía. Mediante su propuesta museográfica donde el lenguaje visual es cuidado al detalle, este museo crea espacios que mediante el impacto invitan a los visitantes a acercarse de una manera muy personal al tema de la guerra en Colombia.
Navarra
El proyecto “Reflexiones desde el arte contemporáneo” del Museo del Carlismo en Navarra, España invita a artistas contemporáneos a que creen una propuesta artística que invite al espectador a debatir y pensar, desde ópticas diferentes a las tradicionales, en los diferentes elementos incómodos de la historia que han tenido relación con el Carlismo, como por ejemplo la Guerra Civil y la posterior dictadura de Franco, entre otras.
La lucha contra el olvido es también la lucha por la construcción crítica y consciente de un futuro sostenible y empático con las personas, con los entornos y con las demás formas de vida.
Para ello, el arte es fundamental.